Ella quería un cambio de polla pero no quería engañar a su novio, hasta que recordó que tenía una polla muy grande allí mismo a su disposición. Le pidió ayuda a su novio y mientras ella le chupaba la polla al perro para que se le pusiera dura, él le pedía que se pusiera a cuatro patas para recibir la gran polla del perro. El animal estaba tan cachondo que empezó a correrse con solo frotarse contra su coño caliente.
- 161966